NEVER FORGET

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viernes, noviembre 09, 2007

CARACTERÍSTICAS DE LOS ZOMBIS




1. Cualidades Físicas

Demasiado amenudo, se ha dicho de los nomuertos que poseen poderes sobrehumanos: fuerza extraordinaria, velocidad vertiginosa, telepatía, etc. Las historias van desde zombis volando por el aire a escalar superficies verticales como las arañas. Aunque estos rasgos pueden venir bien para dramas fascinantes el monstruo individual esta bien lejos de ser un demonio mágico y omnipotente. No hay que olvidar nunca, que el cuerpo de un nomuerto es, para todos los propósitos prácticos, humano. Los cambios que ocurren, están en la manera en que este cuerpo, nuevo y reanimado es usado por el ahora infectado cerebro. No hay modo de que el zombi vuele a no ser que el humano que solia ser pudiera volar. Lo mismo reza para la proyección de campos de fuerza, teletransportación, movimiento a través de objetos sólidos, transformación en lobo, aliento de fuego, o toda la variedad de talentos místicos atribuidos a los muertos vivientes. Imagina el cuerpo humano como una caja de herramientas. El cerebro sonámbulo tiene esas herramientas y sólo esas a su disposición. No puede crear otras nuevas del aire. Pero sí puede, como veremos, utilizar estas herramientas en combinaciones poco corrientes o llevar su durabilidad mas allá de los límites humanos.


A. Vista

Los ojos del zombi no son distintos de los del humano normal. Mientras que siguan siendo capaces (dada su velocidad de descomposición) de transmitir señales visuales al cerebro, el cómo interpreta el cerebro estas señales es otro asunto. Los estudios no son concluyentes en cuanto a las habilidades visuales de los zombis. Pueden ubicar presas a distancias comparables a las de los humanos, pero si pueden diferenciar entre un humano y uno de su propia especie es algo todavia a debatir. Una teoría sugiere que los movimientos hechos por humanos que son más rápidos y suaves que lo de los nomuertos es lo que causa que destaquen al ojo del zombi. Se han llevado a cabo experimentos en los cuales humanos han intentado confundir a los monstruos cercanos mediante la imitación de sus movimientos y la adopción de un arrastrar de pies cojeante y torpe. Hasta la fecha ninguno de estos intentos ha tenido éxito. Se ha sugerido que los zombis poseen visión nocturna, un hecho que explicaría su destreza en la caza nocturna. Esta teoría ha sido puesta en evidencia por el hecho de que todos los zombis son expertos comedores nocturnos, incluso aquellos sin ojos.


B. Oído

No haya duda de que los zombis tienen un excelente oído. no sólo pueden detectar un sonido, sino que además pueden determinar su dirección. El rango básico de detección parece ser el mismo que el de los humanos. Los experimentos con frecuencias extremadamente altas y bajas han dado resultados negativos. Las pruebas también han demostrado que los zombis son atraidos por cualquier sonido, no sólo por aquellos hechos por criaturas vivas. Se ha demostrado que los monstruos advierten sonidos ignorados por los humanos vivos. La más probable, aunque no demostrada, explicación, es que los zombis dependen de todos sus sentidos por igual. Los humanos están orientados hacia la visión desde el nacimiento, dependiendo de otros sentidos sólamente si el primario se pierde. Quizás ésta no sea una desventaja compartida por los muertos vivientes. De ser así, explicaría su habilidad para cazar, luchar y alimentarse en la más total obscuridad.


C. Olfato

A diferencia del oído, los zombis tienen un sentido del olfato más agudo. En ambas situaciones, de combate y pruebas de laboratorio, han sido capaces de distinguir el olor de una presa viva entre todos los demás. No se conoce que secreción en particular señala la presencia de la presa: sudor, feromonas, sangre, etc. En el pasado, gente buscando moverse de manera desapercibida a través de zonas infectadas han intentado "enmascarar" su aroma humano con perfumes, desodorantes y otros productos químicos de olor fuerte. Ninguno tuvo éxito. Se están haciendo ahora experimentos para sintetizar los olores de las criaturas vivas comos señuelo o incluso como repelente de los muertos vivientes. Aún estamos a años de lograr un producto correcto.


D. Gusto

Poco se sabe acerca de las alteradas papilas gustativas de los muertos vivientes. Los zombis tienen la habilidad para distinguir entre la carne humana y la animal y prefieren la primera. Los monstruos también tienen la habilidad para rechazar la carroña en favor de la carne recién muerta. Un cuerpo humano que lleve muerto mas que entre 12 y 18 horas será rechazada como alimento. Lo mismo reza para cadaveres que han sido embalsamados o preservados de cualquier otra forma. si esto tiene algo que ver con el "sabor" es algo de lo que aún no se tiene certeza. Puede tener que ver con el olor, o con otro sentido que aún no se ha descubierto. El por qué exactamente la carne humana es preferida, es algo a lo que la ciencia todavia tiene que encontrar una respuesta para esta anonadante, frustante y terrorífica cuestión.

E. Tacto

Los zombis no tienen, literalmente, sensaciones físicas. Todos los receptores nerviosos permanecen muertos tras la reanimación. Ésta es ciertamente su mayor y mas terrorífica ventaja sobre los vivos. Nosotros, como humanos, tenemos la habilidad de experimentar dolor físico como señal de daño corporal. Nuestro cerebro clasifica tales sensaciones, las empareja con las experiencias que las provocaron y archiva la información como advertencia contra daños futuros. Es un don de la fisiología y del instinto que nos ha permitido sobrevivir como especie. Es por lo que valoramos virtudes tales como el coraje, que inspiran a las personas a llevar a cabo acciones a pesar de las señales de peligro. La incapacidad para reconocer y evitar el dolor es lo que hace a los muertos vivientes tan imponentes. Las heridas no serán notadas y por ello, no detendran un ataque. Incluso si el cuerpo de un zombi está gravemente dañado, continuará atacando hasta que no quede nada.

F. Sexto Sentido

La investigación histórica, junto con las observaciones de campo y de laboratorio, han mostrado que los muertos vivientes han llevado a cabo ataques incluso con todos sus órganos sensoriales dañados o completamente descompuestos. ¿Quiere esto decir que los zombis poseen un sexto sentido? Quizás. Los humanos vivos utilizan menos del 5% de su capacidad cerebral. Es posible que el virus pueda estimular otra habilidad sensorial que haya sido olvidada por la evolución. Esta teoría es una de las más apasionadamente debatidas en la guerra contra los nomuertos. Hasta la fecha, no se ha encontrado evidencia científica que sustente a ninguno de los dos bandos.

G. Curación

A pesar de las leyendas y las tradiciones antiguas, la fisiología de los nomuertos ha demostrado que no poseen capacidades de regeneración. Las células dañadas continúan dañadas. Cualquier herida, no importa su tamaño o naturaleza, permanecerá igual durante la duración del cuerpo reanimado. Se han intentado una amplia variedad de tratamientos médicos para estimular el proceso de sanación en monstruos capturados. Ninguno alcanzó logro alguno. Esta incapacidad para autorepararse, algo que como seres vivos damos por sentado, es una grave desventaja para los nomuertos. Por ejemplo, cada vez que hacemos un ejercicio físico, dañamos nuestros músculos. Con el tiempo, estos músculos se reconstruyen a una condición más fuerte que la anterior. La masa muscular de un monstruo permanecerá dañada, reduciendo su efectividad cada vez que se usa.

H. Descomposición.

La duración media de la "vida" de un zombi -cuanto tiempo es capaz de funcionar antes de que se pudra
completamente- se estima que está entre los 3 y los 5 años. Aunque esto suena quimérico -un cadáver humano capaz de evitar los efectos de la putrefacción- su causa está enraizada en la biología básica. Cuando un cuerpo humano muere, su carne es atacada inmediatamente por billones de microorganismos. Dichos microorganismos siempre estuvieron presentes, en el entorno y dentro mismo del cuerpo. En vida, el sistema inmunológico se mantuvo como una barrera entre estos microorganismos y su objetivo. En la muerte, esta barrera es derribada. Estos microorganismos se multiplican exponencialmente mientras proceden a alimentarse y por ello, destruyen el cuerpo a nivel celular. El olor y la decoloración asociados con cualquier carne en descomposición son los procesos biológicos de la acción de estos microbios. Cuando pides una carne "añeja", estas pidiendo una pieza de carne que ha empezado a pudrirse, su anterormente firme carne reblandecida por microorganismos que destruyen sus firmes fibras. En un corto período de tiempo, esa carne, al igual que un cadáver humano, se disolverá hasta no quedar nada, dejando atrás el material demasiado duro o sin nutrientes para ningún mirobio, tales como huesos, dientes, uñas y pelo. Éste es el ciclo normal de la vida, el modo en que la naturaleza devuelve los nutrientes a la cadena alimenticia. Para detener este proceso y preservar el tejido muerto, se necesita colocarlo en un entorno inadecuado para las bacterias, tales como temperaturas extremadamente altas o bajas, en productos químicos tóxicos como el formaldehído, o, en este caso, saturarlo con Solanum.
Casi todos las especies de microbios envueltas en la descomposición humana corriente han rechazado repetidamente la carne infectada con el virus, embalsamando de manera efectiva al zombi. Si éste no fuera el caso, combatir a los muertos vivientes sería tan fácil como evitarles durante varias semanas o incluso días hasta que se pudrieran hasta los huesos. La investigación todavía tiene que hallar las causas exactas de esta condición. Se ha determinado que al menos algunas especies de microbios ignoran los efectos repelentes del Solanum -de otro modo los nomuertos permanecerían perfectamente preservados para siempre. También se ha determinado que la humedad y la temperatura también juegan un importante papel. Es improbable que los nomuertos que frecuentan los pantanos de Luisiana durante tanto como los que están en el frío y seco desierto del Gobi. Las situaciones extremas, tales como la congelación profunda o la inmersión en líquido preservativo, podrían, hipotéticamente, permitir la existencia de un especimen nomuerto durar indefinidamente. Es sabido que estas técnicas han permitido a los zombis funcionar durante decadas, si no centurias (ver "Ataques Registrados"). La descomposición no quiere decir que un muerto viviente simplemte desaparezca. La putrefacción puede afectar a varias partes del cuerpo en diferetes momentos. Se han encontrado especímenes con el cerebro intacto y el cuerpo casi desintegrado. Otros con el cerebro parcialmente putrefacto, pueden controlar algunas funciones corporales y tener completamente paralizadas otras. Una popular teoría ha circulado recientemente que trata de explicar las antiguas momias egipcias como uno de los primeros ejemplos de zombis embalsamados. Las técnicas de preservación le permitirían funcionar durante varios miles de años tras ser sepultados. Cualquiera con un rudimentario conocimiento del antiguo Egipto encontrará esta historia risiblemente incierta: ¡El paso más importante y complicado en la preparación de un faraón para su entierro era la extración del cerebro!

I. Digestión

Evidencias recientes han desechado de una vez y para siempre que la carne humana sea el combustible de los nomuertos. El tracto digestivo de un zombi está completamente inactivo. El complejo sistema que procesa el alimento, extrae los nutrientes y excreta los desperdicios no es un factor en la fisiología del zombi. Las autopsias llevadas a cabo en nomuertos neutralizados han demostrado que su "alimento" permanece en su estado original, indigesto en todos los tramos del tracto. Esta materia parcialmente masticada y lentamente descompuesta seguirá acumulándose, según el zombi devora más víctimas, hasta que es forzada a través del ano o literalmente, revienta a través del estómago o del recubrimiento instestinal. Aunque este ejemplo más dramático es poco común, cientos de informes de testigos han confirmado que los zombis tienen la barriga distendida. ¡Se encontraron 95 kilos y medio de carne fresca en el sistema de un especimen capturado y diseccionado! Incluso relatos excepcionales han confirmado que los zombis continúan alimentándose mucho tiempo después de que su tracto digestivo haya reventado.

J. Respiración

Los pulmones de los zombis continúan funcionando de modo que absorven aire y los expulsan del cuerpo. Este funcionamiento es el responsable del característico gemido del zombi. sin embargo, lo que los pulmones y la química del cuerpo no logran llevar a cabo, es la extracción del oxígeno y la eliminación de dióxido de carbono. Dado que el Solanum obvia la necesidad de ambas funciones, el sistema respiratorio humano entero queda obsoleto en el cuerpo de un monstruo. Esto explica como los muertos vivientes pueden "andar bajo el agua" o sobrevivir en entornos letales para los humanos. Sus cerebros, como se apuntó antes, no dependen del oxígeno.

K. Circulación

Sería impreciso decir que los zombis no tienen corazón. No sería impreciso, sin embargo, decir que no le encuentran ninguna utilidad. El sistema circulatorio de los nomuertos es poco más que una red de tubos inútiles rellenos de sangre congelada. Lo mismo se aplica al sistema linfático al igual que a otros fluidos corporales. Aunque esta mutación podría parecer que da a los nomuertos otra ventaja más sobre la humanidad, realmente se ha comprobado que es un don del cielo. La carencia de masa fluida previene la transmisión fácil del virus. De no ser así, el combate mano a mano sería casi imposible, ya que el defensor humano casi con certeza acabará salpicado de sangre y/o otros fluidos.

L. Reproducción

Los zombis son criatura estériles. Sus órganos sexuales están necrosados y son impotentes. Se han realizado intentos de fertilizar óvulos de zombi con esperma humano y viveversa. Ninguno ha tenido éxito. Los nomuertos tampoco muestran deseo sexual, ni por su propia especie ni por los vivos. Hasta que la investigación demuestre lo contrario, el mayor temor de los humanos -muertos reproduciendo muertos- es una reconfortante imposibilidad.

M. Fortaleza

Los monstruos poseen la misma fuerza bruta que los humanos. Qué fuerza puede ser ejercitada depende mayormente de cada zombi individual. La masa muscular que una persona posea en vida será toda la que tenga una vez muerto. A diferencia de un cuerpo vivo, no se conoce que las glándulas adrenales funcionen en los muertos, denegando a los zombis la temporal explosión de potencia que los humanos disfrutamos. La única ventaja que poseen los muertos vivientes es un sorprendente aguante. Imagina un entrenamiento, o cualqueir otra actividad física. Las probalidades son que el dolor y el agotamiento determinen tus límites. Estos factores no se aplican a los muertos. Continuarán una acción, con la misma energía dinámica, hasta que los músculos que la sustentan literalmente se desintegren. Mientras esto lleva a monstruos progresivamente más débiles, permite un primer ataque todopoderoso. Muchas barricadas que habrían agotado a tres o incluso cuatro seres humanos en buena forma física han caido ante la determinación de un único zombi determinado.

N. Velocidad

Los muertos "andantes" tienden a moverse perozosamente o cojeando. Incluso sin heridas ni en avanzada descomposición, su carencia de coordinación les dictamina un paso indeciso. La velocidad está determinada principalmente por la longitud de las piernas. Los monstruos más altos tienen una zancada más larga que sus contrapartes más bajos. Los zombis parecen incapaces de correr. Los más rápidos que se han observado, se mueven a una velocidad de apenas un paso cada 1.5 segundos. De nuevo, como con la fuerza, la ventaja de los muertos sobre los vivos es su carencia de fatiga. Humanos que creían que aventajaban a sus perseguidores nomuertos, harían bien en recordar el cuento de la tortuga y la liebre, añadiendo, por supuesto, que en este caso la liebre tiene muchas probabilidades de ser comida viva.

O. Agilidad

El humano vivo medio posee un nivel de destreza un 90 por ciento mayor que el del monstruo más fuerte. En parte se debe a la rigidez del tejido muscular necrosado (de aquí su torpe andar). El resto es debido a sus primitivas funciones cerebrales. Los zombies tienen poca coordinación óculomanual, una de sus mayores debilidades. Nadie ha obsevado a un zombi saltar, ni desde un lugar a otro ni simplemente arriba y abajo. El equilibrio sobre una superficie estrecha está similarmente más allá de sus habilidades. La natación también es una destreza reservada a los vivos. Se ha propuesto la teoría de que, si un cadáver nomuerto se inflara lo suficente como para elevarse hasta la superficie, representaría un peligro flotante. Esto es inusual, no obstante, ya que la lenta velocidad de descomposición no permite la acumulación de subproductos gaseosos. Los zombis que se internan o caen en cuerpos de agua se encontrarán, probablemente, vagando por el fondo hasta que eventualmente se disuelvan. Pueden ser acertados trepadores, pero sólo en ciertas circunstancias. Si un zombi detecta una presa por encima de él, por ejemplo, en el segundo piso de una casa, siempre intentará subir. Los zombis intentarán escalar cualquier superficie sin importarle cuan inpracticable o imposible sea. En todas salvo las situaciones más fáciles, estos intentos se han encontrado con el fracaso. Incluso en el caso de escaleras, cuando se requiere una sencilla coordinación mano a mano, solamente uno de cada cuatro zombis lo logrará.

2 comentarios:

Mopeto dijo...

Jajajajajaja, pinches zombies del video xD

Mmmm, ahora se todo acerca de los zombies =3

Juan kof dijo...

esto significa k El gobierno o x agencia . Tienen zobis .y arriesgan El escape Del virus????

...



Grax Mijita >3~
12 / 09 / 2006 - El día en que mi Play Station 2 Murió